La tóxica, así se le dice ahora a esa novia intensa o cansona que vive molestando todo el día a su novio, le arma problema por todo, no lo deja ver a sus amigos y le hace la vida difícil. Parece un poco machista el concepto porque así como pueden existir este tipo de novias, también hay tóxicos que también le hacen la vida complicada a sus novias o esposas. Pero acá nos vamos a referir acerca de la persona tóxica en el trabajo, para hacerlo genérico porque puede ser cualquiera, hombre o mujer, o cualquier género con que se identifique, lo importante acá son las actitudes y comportamientos que hace que se puedan denominar d esta manera. En una empresa, como en cualquier otro contexto, tener a todo el mundo contento es prácticamente imposible, pero eso no quiere decir que uno se la tenga que pasar quejándose por las cosas que no le gustan todo el tiempo. Eso no quiere decir que toque quedarse callado siempre, pero quejarse sin actuar no tienen ningún sentido. Desafortunadamente el quejarse por todo es un comportamiento común en las personas dentro de las empresas, en algunas más que otras, pero siempre hay desmotivados, agotados, desilusionados, defraudados, que sienten la necesidad de desahogarse con sus compañeros sobre cómo se sienten. Y tampoco es que eso sea malo, a veces toca sacar todo lo que se tiene adentro, pero se debe saber el cómo, con quién y cómo hacerlo.
Lo no tan bueno ocurre cuando este se vuelve un comportamiento recurrente, casi costumbre de quejarse por todo y por todos en el trabajo. Nada les sirve y no les molesta manifestarlo en su círculo cercano. Rodearse de este tipo de personas no es sano para poder llevar un ambiente adecuado dentro de una compañía, todos tenemos algún tipo de problema, o tenemos algo en que no estamos de acuerdo, pero igual tratamos de llevar eso de la mejor manera y cumplir con los objetivos que nos han propuesto y los propios. Pero el tener de cerca a este tipo de individuos puede que termine afectando nuestro bienestar y empiece a cambiar la percepción que tenemos sobre diferentes tipos de situaciones. Es claro también que la motivación va en cuenta de cada uno, no hay que esperar factores externos para dar lo mejor de uno, cosas como un buen jefe, ambiente laboral, bonos y otros beneficios ayudan, a veces bastante, a que la actitud hacia el trabajo mejore, pero si no se cuenta con alguno de ellos, o con ninguno, igual se debe dar lo mejor, ya que eso habla mucho de nuestra marca como personas y profesionales.
Pero un compañero o compañera tóxica, quejumbrosa, pesimista, no ayuda mucho en este propósito de mantener siempre la mejor actitud y motivación, este es un factor que se puede controlar, es mejor alejarse de este tipo de personas y tratar de buscar otras que compartan la forma que tienen de ver las cosas.
No estoy seguro sobre la afirmación que hacen algunas personas y «expertos» que las cosas buenas atraen cosas buenas, pero lo que sí es cierto es que rodearse de un ambiente positivo y sano contribuye a que nuestra salud mental y emocional sean buenas y con esto se puedan afrontar los retos y actividades de la mejor manera. Esto no garantiza el éxito pero sí incrementa la probabilidad que lo alcancemos.
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